miércoles, 7 de abril de 2021

Reflejos

En el preciso y precioso instante en que el sol besa las aguas pareciera que el momento va a ser infinito, que el tiempo se detiene y que la esperanza es por esos minutos una realidad... 
 
Pero el beso pasa y el tiempo transcurre nuevamente a la velocidad normal. El sol se oculta... y a una le queda el sabor del recuerdo, de la esperanza ya atenuada y de la certeza que, en el momento menos pensado, probablemente a la misma hora, aunque en distinto lugar, podremos volver a vivir como si el tiempo fuese a parar...